Propiedad intelectual para el bien común

Sr. Director:

En Chile la propiedad intelectual se ha vuelto un pilar estratégico para impulsar ciencia, tecnología e innovación. La Ley Nº 21105, que crea el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e innovación, establece como fines promover la transferencia tecnológica, la vinculación con la sociedad y el acceso abierto a resultados financiados con fondos públicos.

Esta visión implica un cambio cultural, pues la protección de la propiedad intelectual debe entenderse como una herramienta al servicio del bien común. En un seminario de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, se destacó que las universidades deben adoptar políticas de licenciamiento centradas en utilidad social, transparencia y sostenibilidad, sin perder ética ni escalabilidad.

La experiencia de empresas como 3M lo demuestra, con más de 135 mil patentes, ha impulsado una estrategia de innovación abierta que combina alianzas, internacionalización y una cultura que fomenta la creatividad interna. Su aporte quedó reflejado en el respirador N95, basado en tecnología patentada de microfibras electrostáticas, ejemplo de cómo la propiedad intelectual puede servir a la humanidad cuando hay voluntad de transferir conocimiento con propósito.

En Chile varias universidades poseen activos de propiedad intelectual de alto valor público, pero su transferencia al sector productivo y a la sociedad sigue siendo limitada. El proyecto de ley en trámite busca facilitar esta interacción y reconocer su valor estratégico con visión país.

En Chile la propiedad intelectual, debe dejar de ser un fin en sí mismo para convertirse en una herramienta al servicio del bien común, fortaleciendo el vínculo entre ciencia y sociedad y consolidando a las universidades como motores del desarrollo.

Nassib Segovia
Vicerrector de Facultad de Economía, U.Central