Cinco mitos que debemos derribar sobre la donación de órganos y tejidos

Más de 2.200 chilenos esperan hoy un trasplante, perola desinformación continúa siendo una de las principales barreras para entregarles una segunda oportunidad.

En Chile, la ley establece que toda persona mayor de 18 años es donante de órganos y tejidos al fallecer, salvo que en vida haya expresado lo contrario mediante un documento notarial. Aun así, cuando la familia se opone, debe firmar un acuerdo en el que reconoce que no se está respetando la voluntad del fallecido.

Actualmente, según el Ministerio de Salud, cerca de 2.222 personas se encuentran en lista de espera por un trasplante de órganos, ya sea, corazón, pulmón, hígado, páncreas o riñón. El Dr. Erwin Buckel, jefe del Programa de Trasplantes de Clínica Universidad de los Andes, comenta que “la donación de órganos y tejidos en el país no es constante, sino más bien cíclica, ya que depende directamente de los centros de trasplante y de la lista de espera”.

Con motivo del Día Nacional de la Donación de Órganos y Tejidos, el especialista aclara cinco mitos frecuentes que rodean este tema:

  1. Solo los mayores de 18 años pueden donar

Lo relevante no es la edad, sino el estado de los órganos. En el caso de menores, la decisión recae en la familia o los tutores legales.

  1. El trasplante es una cura definitiva

No necesariamente. Un trasplante puede prolongar y mejorar la calidad de vida, pero la persona no está libre de riesgos de sufrir rechazo o complicaciones. El éxito depende del órgano, la salud del paciente y los cuidados posteriores.

  1. Todos los órganos sirven para trasplantar

No todos. La compatibilidad entre donante y receptor es clave. En Chile, un donante fallecido puede entregar corazón, pulmón, hígado, riñón y páncreas; mientras que un donante vivo puede aportar riñón o parte del hígado.

4.Un donante vivo queda con mala calidad de vida

Generalmente, no. La mayoría de los donantes llevan una vida plena y saludable después de la recuperación. Aunque existen riesgos quirúrgicos, la evolución suele ser positiva.

  1. El trasplante es siempre la última opción

No siempre. En muchos casos es la alternativa más eficaz cuando otros tratamientos no están funcionando. Los avances médicos han permitido que los pacientes trasplantados alcancen una calidad de vida cada vez mejor.

El Dr. Buckel enfatiza que “donar órganos es un acto esencial; no solo porque miles de personas dependen de ello para seguir viviendo y cualquier persona, uno de nosotros o un ser querido puede en algún momento necesitar un órgano para seguir viviendo”.