Los parlamentarios pedirán citar al ministro Cordero a la Comisión de Seguridad por los nombramientos de altos cargos y la falta de experiencia en seguridad pública. Los legisladores acusaron nombramientos políticos.
En medio del creciente clima de inseguridad que afecta al país, los diputados de oposición Mauro González, Marcia Raphael y Carla Morales (RN) cuestionaron con dureza los recientes nombramientos realizados por el Ministerio de Seguridad Pública, acusando falta de idoneidad profesional en los nuevos cargos. Los legisladores advirtieron que estas decisiones ponen en riesgo la implementación de políticas eficaces para enfrentar la crisis delictual, y denunciaron que el Ejecutivo prioriza criterios políticos por sobre la experiencia técnica en seguridad, debilitando así la institucionalidad del sector.
En ese sentido, la diputada Carla Morales ingresó un oficio dirigido al ministro y al subsecretario de Seguridad Pública, solicitando información detallada sobre los criterios de contratación de altos funcionarios de la cartera. En el documento, argumenta que, al menos 12 trabajadores presentan perfiles políticos, escasa experiencia en seguridad o lazos personales con figuras del oficialismo.
“La aparente preferencia por nombramientos basados en afinidades políticas, sin respaldo técnico robusto, no solo pone en entredicho la eficacia institucional, sino que también erosiona la confianza en el Estado y sus autoridades”, plantea el oficio.
Morales, representante de la región de O’Higgins, también cuestionó la ética de remuneraciones millonarias en cargos estratégicos.
“Considerando que varios de estos funcionarios perciben remuneraciones que fluctúan entre $2,3 millones y $9 millones mensuales, resulta cuestionable privilegiar la lealtad política por sobre la experiencia en áreas críticas, en un contexto de alta sensibilidad social frente a la inseguridad y la violencia”, sostiene.
Por su parte, el diputado Mauro González expresó su preocupación por la falta de profesionalismo en la conformación del equipo ministerial y si realmente poseen una claridad y lineamientos para enfrentar la ola de violencia en el país.
“Se esperaría que en la primera línea de combate contra fenómenos tan complejos y letales como el crimen organizado, el sicariato o el narcoterrorismo, se ubicaran a los mejores en su campo: criminólogos, expertos en inteligencia o especialistas en seguridad estratégica con una trayectoria probada en la materia”, señaló.
Asimismo, y a juicio del parlamentario representante de la región de Los Lagos, el Ejecutivo ha optado por una lógica de favoritismos.
“En cambio, lo que se ve en el Ministerio de Seguridad Pública es la designación de ‘amigos’ con escasa o nula experiencia en el combate directo a la criminalidad. Es decir, más importan los pitutos que enfrentar al crimen”, sentenció.
Sumado a lo anterior, González adelantó que exigirán explicaciones públicas. “Estamos frente a una visión que subestima la gravedad del problema y superpone su ideología por sobre el bien mayor, que no es otro que la seguridad de un país. Citaré al ministro Cordero a la Comisión de Seguridad para que, de cara al país, indique las razones para contratar personas sin experiencia en criminalidad, inteligencia y seguridad”, advirtió el legislador de Renovación Nacional.
Finalmente, la congresista Marcia Raphael, en tanto, apuntó directamente a la falta de impacto de la cartera en los índices delictuales.
“Yo creo que hay que atacar la improvisación que ha tenido este ministerio, desde errores anteriores como los nombramientos de seremis, hasta el nulo efecto que ha tenido en cifras de seguridad”, afirmó.
Además, la representante de la Región de Aysén, también cuestionó el uso del aparato estatal para beneficiar a cercanos del oficialismo.
Este nuevo episodio se suma a una larga lista de cuestionamientos hacia el Ministerio de Seguridad, encabezado por el ministro Luis Cordero, cuya gestión ha sido objeto de escrutinio tanto por sus resultados como por las figuras que lo acompañan. Entre los nombres más polémicos figuran un licenciado en historia, una kinesióloga, una ex candidata municipal y exlíderes estudiantiles, algunos con roles clave como jefes de asesores o coordinadores de división, sin mayor vínculo con materias de seguridad estratégica.
Desde la oposición, los parlamentarios insisten en que cargos de esa envergadura deben ser ocupados por profesionales con formación y experiencia acreditada en gestión delictual, inteligencia o prevención del crimen. “Continuar con esta lógica de cuotas políticas en temas tan sensibles es un error que la ciudadanía no está dispuesta a seguir tolerando”, concluyó Raphael.