En horas de la tarde de ayer viernes, el comandante en jefe del Ejército, Javier Iturriaga, se reunió con el Presidente Gabriel Boric y la ministra de Defensa, Maya Fernández, en el palacio de La Moneda, tras los nuevos antecedentes muerte del conscripto Franco Vargas.
Tras la reunión de aproximadamente una hora y 15 minutos, la ministra Fernández señaló que citaron al alto mando del Ejército con el fin de que detallara los antecedentes en torno a lo ocurrido en la marcha fatal en Putre.
Asimismo, informó que «el Presidente ha aceptado la propuesta de renuncia del General Castillo y el Coronel Silva. Y por último informar que el comandante en jefe del Ejército sigue en sus funciones».
En detalle se trata de la renuncia de comandante de la Brigada Huamachuco, Sebastián Silva, y del jefe de la VI División de Ejército, Rubén Castillo.
Asimismo, explicó que, «lo primero que planteó el Presidente es la preocupación por la familia, fue muy claro en decir que se requiere verdad, justicia y sobre todo que las familias sepan todo lo que ha ocurrido con sus hijos. El Estado y el Ejército que tiene bajo sus mandos a estos jóvenes tienen que garantizarle su protección».
Además, mencionó que, «hemos instruido al Ejército colaborar, apoyar a la familia, y sobre todo, entregar todos los antecedentes que permitan esclarecer lo ocurrido pensando en las familias«.
«Hemos llevado adelante una mesa de trabajo (…) para la revisión de protocolos porque no queremos que estos hechos ocurran en ninguna parte de Chile, tenemos que darle garantías a los jóvenes que quieren hacer el servicio militar», cerró.