Universidad de Chile consiguió su segundo triunfo en cuatro fechas, pero aún sigue sin convencer. Los azules terminaron sufriendo frente un humilde Magallanes que sólo ha conseguido 1 punto en el campeonato, pero que no fue impedimento para terminar con los azules pidiendo la hora. El equipo de Pellegrino sigue sin convencer y, por ahora, no hay indicios de mejora.
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Por Sebastián María Espinoza
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Con dos goles del Chorri Palacios, parecía ser una jornada donde por fin los hinchas del romántico viajero terminarían sin sufrimiento, pero el descuento de Julián Alfaro puso la incertidumbre hasta los 7 minutos de descuento que dio el árbitro.
La U es un equipo que se preocupa más de defender, que de generar un fútbol asociado y su principal arma es el pelotazo a las espaldas de los defensores. Aún no hay un equipo titular claro y por ahora sigue en una tapa de experimentación. ¿Hasta cuándo hay plazo? No está claro, lo que sí, que con este nivel no existe ilusión de pelear arriba y nuevamente aparece los fantasmas de terminar el año sufriendo.
Párrafo aparte para Azul Azul, la concesionaria no sólo ha demostrado con creces que su principal objetivo es sacar dinero de manera fácil y rápido. Ahora también ha abusado de los hinchas, especialmente los abonados, cambiando las localías fuera de Santiago y generando un gran problema a la fanaticada azul, los que nunca tienen seguro que verán a su club en Santiago.