Ejército despliega su maquinaria de Ingenieros para combatir los incendios forestales

Dentro de los múltiples medios técnicos necesarios para combatir los incendios forestales que afectan a las regiones del Biobío, Ñuble y La Araucanía destaca la maquinaria de Ingenieros, que habitualmente se emplea para realizar movimiento de tierra, y ahora es imprescindible para construir rápidamente grandes cortafuegos capaces de contener el avance de las llamas.

Las distintas unidades de Ingenieros del Ejército de Chile han desplegado sus bulldozer, retroexcavadoras, cargadores frontales, motoniveladoras y mini máquinas bobcat en apoyo de BRIFEs, bomberos y brigadistas forestales, lo que ha requerido de un importante esfuerzo logístico y de coordinación, permitiendo llevar los medios técnicos al lugar preciso en el momento indicado para brindar el muy necesario apoyo.

Una de las comunidades que ha recibido este apoyo es el sector de Paraguay, en la comuna de Los Ángeles. Patricio Vega, habitante del lugar, señala que “estamos combatiendo este fuego desde el día viernes, con la ayuda de todos los vecinos de las localidades cercanas. Gracias a Dios hemos podido controlarlo y no tenemos desgracias, ni de personas ni de viviendasAhora estamos haciendo cortafuegos con la ayuda del Ejército, que nos está apoyando para salir de esta emergencia. Tenemos que sacarle provecho a esta maquinaria. Le pido a los soldados que no decaigan, necesitamos la ayuda del Ejército y de todos los equipos de emergencia. Sin esta ayuda la gente se queda sola y esto no se puede combatir.”

El Capitán Andrés González explica que en este sector “realizamos un trabajo de cortafuegos para mantener a salvo a 68 familias. Este cortafuego evita la propagación del incendio y así los focos pequeños que encontramos pueden ser controlados efectivamente por personal de CONAF. Para tranquilidad de la población también realizamos tareas de seguridad si la ciudadanía tiene que evacuar sus casas.

Una forma de combatir un incendio forestal es el llamado método indirecto, donde se controla el fuego encerrándolo dentro de una línea de control formada por un conjunto continuo de cortafuegos que eliminan la vegetación en la trayectoria del incendio. Dicha línea de cortafuego corresponde a una franja de terreno, de la longitud que sea necesaria y de varios metros de ancho, donde se ha retirado la vegetación o material combustible y raspado el terreno hasta el suelo mineral, lo que impide que el incendio pueda esparcirse. Es aquí donde destaca la maquinaria de ingenieros, al ser capaz de crear cortafuegos con mucha más rapidez y eficiencia que los brigadistas equipados con herramientas manuales como palas.