Un verdadero papelón realizó la Sub 20 de Chile, que encabeza técnicamente Patricio Ormazábal. La Roja perdió por la cuenta mínima frente a Venezuela y se despidió de forma abrupta del torneo y no dirá presente en el Mundial de Indonesia.
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Por Eugenio Carrasco
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Uno de los peores fracaso de la historia de una selección menor fue la que se vivió anoche en Colombia en el Estadio Pascual Guerrero de la ciudad de Cali, al caer con la selección de la Vino Tinto, no sólo por el resultado, sino también por el pobre desempeño demostrado durante todo el torneo por Chile, teniendo todo para clasificar pero su paupérrimo desempeñó lo impidió, sumando a las malas decisiones técnicas.
Un primer tiempo que dejó poco y nada. Chile se conformaba con el empate que lo mantenía con vida para llegar al exagonal, mientras uno de sus mejores hombres veía el partido desde la banca. Darío Osorio, la joya de la Universidad de Chile y quien además es mirado desde Europa ingresó sólo en el segundo tiempo cuando el equipo nacional ya perdía por la cuenta mínima tras un penal convertido por los Venezolanos.
Juegada que se remonta al minuto 47, cuando Yahir Salazar intenta despejar con una palomita y la pelota le rebota en el mano. El árbitro no dudo en cobrar desde los doce pasos.
Con más desesperación que fútbol, Chile intentó, incluso Ormazábal terminó jugando con tres delanteros pero el cuadro que dirige Fabricio Coloccini se cerró bien en defensa y logró controlar los ataques tibios de la Roja.
En definitiva Chile se despide sin pena ni gloria de la competencia que dejó más dudas que certezas del recambio generacional de la Roja adulta y así se completo un amargo registro de 10 años sin clasificar al un mundial desde Turquía 2013.
De esta forma, la selección vuelve este lunes a Chile con la duda si PATRICIO ORMAZÁBAL seguirá a cargo de este grupo o bien cesará sus funciones. Una interrogante que sólo se definiría en los próximos días, donde la afición pide a gritos la salida del DT.