Un equipo de arqueólogos de EEUU descubrió en Cisjordania una serie de artefactos que apuntan al lugar donde se encontraba el santuario Tabernáculo antes de desaparecer en el 1050 a.C. El lugar corresponde a las pistas que da la Biblia.
El Tabernáculo fue un santuario móvil construido por los israelitas bajo las instrucciones que Dios dio a Moisés. Incluía en su interior otro templo que albergaba el Arca de la Alianza. Era un cofre de madera cubierto de oro que, según la tradición judía, fue diseñado y creado por mandato divino para guardar las tablas de los diez mandamientos.
Se cree que el Tabernáculo acabó siendo destruido por los filisteos en el 1050 a.C., más o menos cuando robaron el Arca de la Alianza a los israelitas. Según la Biblia, el templo se situaba en Silo, una antigua ciudad que precedió a Jerusalén durante 369 años: desde la época en la que murió el Sumo Sacerdote Elí hasta el robo del Arca.
Los pasajes de la serie de libros canónicos señalan que en el santuario interior —también conocido como el Sanctasanctorum— había un velo sostenido por cuatro postes. Esta instalación estaba rodeada por un patio exterior y un muro. El Tabernáculo albergaba también una mesa y un altar de oro con incienso.
Ahora, un equipo de arqueólogos de EEUU ha descubierto una zona rectangular en el lecho de una roca situada cerca de una cima. Esta área, conocida como la Meseta del Tabernáculo, es lo suficientemente grande como para albergar el patio del santuario, aseguró Tom Meyer, profesor de estudios bíblicos en el Colegio Bíblico y Escuela de Postgrado Shasta en California.
Además, los arqueólogos estadounidenses hallaron pequeñas cavidades excavadas a intervalos que quizá fueran agujeros utilizados para sostener los postes de madera de la valla exterior del santuario.»Los arqueólogos también descubrieron cerca tres cuernos de piedra que en su día adornaron tres de las cuatro esquinas del altar ubicado en el patio del Tabernáculo», explicó Meyer, citado por el periódico británico Express.
El interlocutor del medio considera que todas estas pruebas «encajan perfectamente» como las piezas de un antiguo rompecabezas. Con su ayuda los científicos pueden señalar el lugar exacto donde se encontraba el santuario hace unos 3.400 años, antes de ser destruido.
«La ciudad de Silo, situada en el corazón de la región montañosa bíblica, se convirtió en la primera capital de Israel poco después de la conquista de Canaán, alrededor del 1400 a.C. La ciudad era el centro cultural, religioso y político de la nación. Por ello, fue aquí donde Israel instaló el Tabernáculo», resumió el profesor.