El papa Francisco durante su estancia en Japón llama a los líderes mundiales a renunciar a las armas nucleares

El papa Francisco, durante su estancia en Japón, llamó a los líderes mundiales a deshacerse de las armas nucleares cuyo impacto calificó de «catastrófico» para la humanidad.

«Con el convencimiento de que un mundo sin armas nucleares es posible y necesario, pido a los líderes políticos que no se olviden de que las mismas no nos defienden de las amenazas a la seguridad nacional e internacional de nuestro tiempo», dijo el pontífice, citado por el sitio web del Vaticano, al pronunciar un discurso en el Parque de la Paz en la ciudad japonesa de Nagasaki.

Asimismo el Papa pidió a los mandatarios a considerar el «impacto catastrófico» de las armas nucleares sobre la humanidad.

El pontífice, que realiza un viaje apostólico a Japón, indicó que vivir en el mundo en paz, libre de armas nucleares es el sueño de millones de hombres y mujeres en todo el mundo.

«Convertir este ideal en realidad requiere la participación de todos (…) nuestra respuesta a la amenaza de las armas nucleares debe ser colectiva y concertada, basada en la construcción ardua pero constante de una confianza mutua que rompa la dinámica de desconfianza actualmente prevaleciente», afirmó.

Precisó también que los líderes mundiales ahora tratan de defender y garantizar la estabilidad y la paz a sus pueblos basándose en una falsa seguridad «sustentada por una mentalidad de miedo y desconfianza» lo que al final llevará al deterioro de las relaciones entre Estados.

El papa Francisco agregó que la paz y la estabilidad internacional son «incompatibles con todo intento de fundarse sobre el miedo a la mutua destrucción o sobre una amenaza de aniquilación total».

Más tarde, al pronunciar un discurso en el Memorial de la Paz de Hiroshima, el Papa calificó de crimen el uso de la energía atómica con fines de guerra.

«El uso de la energía atómica con fines de guerra es hoy más que nunca un crimen, no sólo contra el hombre y su dignidad sino contra toda posibilidad de futuro en nuestra casa común. El uso de la energía atómica con fines de guerra es inmoral. Seremos juzgados por esto», enfatizó.

El pontífice está en su primera visita en Japón, la cual durará hasta el 26 de noviembre.