Partido Progresista rechaza quórum 2/3 para reformar la Constitución: “Vemos cómo ciertos sectores tratan de repetir la historia y llegar a acuerdos a espaldas del movimiento social”

El presidente de la coalición, Camilo Lagos, instó a “no aceptar el poder de veto de la derecha, a no replicar el error del 89”. “No puede nacer una nueva Constitución con los mismos vetos de la Constitución Pinochetista”, dijo tras una extensa jornada de negociaciones entre la oposición y el oficialismo, en la sede del Congreso en Santiago.

El Partido Progresista de Chile, a través de su presidente nacional Camilo Lagos, rechazó este jueves la propuesta impulsada por el oficialismo para acordar los términos de la nueva Constitución, que implica quórum de 2/3 para aprobar artículos, o de lo contrario, se mantendría la actual Carta Magna.

Tras una intensa jornada de tratativas ente la oposición y el oficialismo, el líder de la coalición instó a “no aceptar el poder de veto de la derecha, a no replicar el error del 89”, enfatizando que “no puede nacer una nueva Constitución con los mismos vetos de la Constitución Pinochetista”.

En la misma línea, detalló que “precisamente hace 30 años -el año 89- la entonces Concertación con la derecha, pactó una serie de reformas políticas a la Constitución. Ésta tenía considerado el Plebiscito, pero en esa reforma se eliminó”, dijo.

“En esas reformas se establecieron los quórum para la reforma hace 30 años, y parece que la historia vuelve a repetirse esta vez como farsa”, continuó Lagos, recalcando que después “de cuatro semanas de una histórica movilización ciudadana -de la cual hay que estar alegre y verla positivamente en lo que ha significado para un país que ha despertado y que está debatiendo- por primera vez, quizás, en 30 años, se está debatiendo sobre políticas públicas, sobre su futuro, sobre modelos económicos, sobre la Constitución”.

Por último, en la instancia que se llevó a cabo en la sede del Congreso en Santiago, Lagos también apuntó a que “ciertos sectores tratan de repetir la historia, de llegar a acuerdos a espaldas del movimiento social, a espaldas de la ciudadanía, y exigen establecer vetos de lo que va a ser la discusión futura de la Constitución”, e insistió en el rechazo a la propuesta mientras ésta no permite cambios.