Partido Regionalista Independiente (PRI) marca posición en favor de una «nueva constitución»

SANTIAGO – Afirman que en la nueva carta fundamental se debe corregir el modelo, rol del Estado y fortalecer la descentralización.

A través de un documento titulado «debate constitucional y agenda social profunda como salida al actual clima de efervescencia social en chile», el Partido Regionalista Independiente (PRI) entregó su propuesta por una nueva constitución a sus dirigentes, bases y también al gobierno en la reunión que se desarrolló esta tarde con los partidos de Chile Vamos y que encabezó el Presidente Piñera.

En el texto, la colectividad regionalista manifiesta «que es un tema que ya caló hondo en el pueblo chileno y del que tenemos dos opciones: escuchar y tomar acción al respecto o seguir estirando el elástico por largos y difíciles meses venideros, extendiendo así un debate que está instaurado a fuego en la opinión pública nacional».

«Lo relevante es que en Chile ha surgido un notorio interés de la sociedad civil por participar de este debate, instancia en la que se plasmen una serie de sentimientos, demandas y derechos sociales y en materia de salud y seguridad, protección al medio ambiente y reformas al régimen político, entre otros (…), Ya la población no cree en «cambios o modificaciones constitucionales». Ellos piden, quieren y hablan de una «nueva Constitución» a secas.», agrega el documento.

Respecto del documento para una nueva constitución, el Secretario General del PRI, Rodrigo Caramori comentó que «Ya han pasado 24 días desde que comenzaron las manifestaciones y los disturbios. El Gobierno ha lanzado una serie de medidas importantes en materia de una nueva agenda social y en torno al restablecimiento del orden público. Sin embargo, creemos propicio que el Gobierno vaya más allá y realice un esfuerzo superior aún mayor en esta materia. Por ejemplo, sobre el aumento a la pensión solidaria, creemos que se debe hacer un esfuerzo mayor y aumentarla al 40% o por qué no al 50%. Ese es un esfuerzo sustantivo, potente y notorio que la ciudadanía sabrá valorar».

«La Constitución no es un ritual religioso sagrado, es una pieza más en nuestro ordenamiento jurídico. Por ende, sentimos necesario el debate y apuntar hacia una nueva constitución, debemos actualizarla e introducir los cambios que el siglo 21 y el pueblo de Chile nos exige. Desde el PRI, le hemos solicitado al Gobierno que se anuncie un cronograma claro y un mecanismo que sea serio, responsable, democrático y participativo para construir entre todos una nueva Constitución para Chile, donde se plasmen una serie de sentimientos, demandas, derechos sociales y reformas al régimen político, entre otros», enfatizó Caramori.

«En el PRI creemos vital que actuemos con sentido de urgencia en todo. Podemos avanzar en varios frentes. Si se anuncia un cronograma para trabajar la construcción de una nueva Constitución, podemos, en paralelo, llevar a cabo una transformación social ambiciosa en nuestro país. Para eso el Gobierno y el Presidente se han mostrado disponibles. Además, creemos que la izquierda también debe mostrar una actitud más propositiva que la evidenciada hasta ahora. Ellos han sido parte del problema y les hacemos la invitación para dejar la pequeñez y pensar en la gente que lo está pasando mal y mirar el país con un sentido más profundo y solidario», añadió el secretario general.

Finalmente, los regionalistas enfatizan en el escrito que «no podemos dejar pasar la ocasión -como Partido Regionalista- para mencionar que un nuevo texto debería consignar el establecimiento de un Estado Solidario donde se refuerce la descentralización que hoy nos tiene cautivos en diversas áreas, lo cual agrega que se reafirme la realización de la elección de Gobernadores Regionales y se potencien las facultades de las nuevas autoridades. Adicional a eso, se debe mantener nuestra cultura de Estado unitario, pero con una fuerte dosis de autonomía para las regiones del país».

En síntesis, la propuesta de la tienda Regionalista plantea:

  1. Abrirnos y guiar el debate para una nueva Constitución.
  2. Anunciar al país un cronograma claro que busque los mejores mecanismos que garanticen un proceso responsable, serio, democrático y participativo de todos los sectores relevantes del país.
  3. Sea cual sea el mecanismo elegido se tiene que orientar el trabajo en la instauración de un Estado Solidario y que fortalezca el regionalismo y la descentralización de Chile.
  4. Todo lo anterior debe ir acompañado de una nueva Agenda Social, tal como lo ha anunciado el Gobierno, pero que profundice y haga un esfuerzo superior a lo que se planteado hasta ahora.