El Presidente del Partido Radical Carlos Maldonado se refirió al proyecto de reducción de jornada laboral a 40 horas que se discute en el Congreso, e hizo un llamado a buscar acuerdos «de toda la oposición», para poder sacar adelante una legislación que es requerida por la ciudadanía y en la que aseguró «el gobierno no ha dado pie con bola».
En opinión del timonel, es necesario que, en este punto del debate, se entienda que este tema debe ser abordado como política pública relevante, y por lo tanto espera que ninguna colectividad de la oposición sienta que puede irse por su cuenta o llevar conversaciones paralelas buscando réditos puntuales.
Maldonado señaló que como partido apoyan la reducción de la jornada a 40 horas, pero agregó que «las buenas políticas públicas deben ser implementadas gradualmente, así es que reducción de la jornada laboral, sí, gradualidad también, y nosotros aspiramos a un gran acuerdo como oposición, donde nadie se vaya por su propio camino en este tema de la jornada laboral, sino que tengamos un gran acuerdo, ojalá desde la DC al Frente Amplio, sobre qué vamos a decirle al país, qué vamos a proponer sobre la jornada laboral. Si luego es posible que ese acuerdo de la oposición sea un acuerdo transversal, es decir gobierno – oposición, mejor aún», afirmó.
Maldonado aseguró que «es importante que en esto nadie se sienta tentado a irse por la libre y llegar a algún acuerdo paralelo con el gobierno que haga más difícil el entendimiento estratégico de la oposición, que es necesario para construir una alternativa de Gobierno para Chile».
«Sin duda los trabajadores esperan que una reducción de la jornada tenga su efecto lo más rápido posible, y por eso hay que buscar un acuerdo, que todos como oposición tengamos un acuerdo sobre la gradualidad. Que nadie se sienta tentado, ni empecemos con una especie de concurso, sobre quién propone menos años de gradualidad. Así como en cuanto a la extensión de la jornada hay una voluntad política y ciudadana para que la jornada baje a 40 horas, que en cuanto a la gradualidad seamos capaces de ponernos de acuerdo en algo razonable que compatibilice la calidad de vida de los trabajadores y sus familias, con la buena marcha de las empresas, las remuneraciones y el empleo», sentenció.
Finalmente el líder radical remarcó que esta discusión «debe complementarse en algún momento con otra que es también muy importante, y que es sobre la productividad, y en eso debemos buscar un sistema distinto de incentivos y participación de los trabajadores en los resultados de las empresas, pues los trabajadores sienten que hay dos realidades: una, especialmente de las grandes empresas, que obtienen importantes utilidades y concentran parte importante de las rentas del país, y otra realidad, la de los trabajadores que se sienten atados a una jornada laboral extensa y a un sueldo normalmente fijo y más bien pequeño. Las mediciones de los economistas en Chile muestran que en nuestro país no hay una relación adecuada ni virtuosa entre los resultados de las empresas y los incentivos a los trabajadores».