Lacunza, el FMI y Alberto Fernández: ¿Cómo se desactiva la bomba argentina?

Mauricio Macri pidió a Hernán Lacunza, nuevo ministro de Hacienda, «cuidar a los argentinos» durante las elecciones. En diálogo con Sputnik, dos economistas opinaron sobre cómo deberá vincularse con el líder de la oposición y el FMI para evitar una «implosión» antes de diciembre.

por Socio Informativo
Agencia de Noticias Sputnik

Pasaban algunos minutos de las 8:30 de este martes 20 de agosto, cuando el economista Hernán Lacunza juró ante el presidente de Argentina, Mauricio Macri, como nuevo ministro de Hacienda de la Nación.

Durante el acto, el presidente le pidió «cuidar a los argentinos». Una solicitud que encuentra explicación en el impacto de los últimos vaivenes de la economía argentina, acuciada por una fuerte devaluación y la escalada de la inflación luego del resultado de las elecciones primarias del 11 de agosto.

«No te lo pido como candidato a presidente, en una especulación política. Te lo pido claramente como presidente cuyo foco, y el de todo el equipo que ahora pasás a integrar, tiene que estar puesto en cómo morigerar cualquier costo que pueda tener este proceso electoral sobre la vida diaria de todos nosotros en los próximos meses», le dijo el mandatario al flamante secretario de Estado.

A su turno, el licenciado en Economía graduado en la Universidad de Buenos Aires y con posgrado en la Universidad Torcuato Di Tella, aseguró que el Gobierno argentino cumplirá con «las pautas fiscales establecidas en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI)», que visitará el país suramericano en los próximos días para evaluar su grado de cumplimiento.

Lacunza también afirmó que «estabilizar el tipo de cambio es lo mejor que podemos hacer por las familias que tienen menores ingresos y de ingresos medios, que son las que menos posibilidades tienen de preservar sus ahorros frente a esa volatilidad o haber erosionado su poder adquisitivo por la inflación asociada a los saltos cambiarios».

Hernán Lacunza
© REUTERS / AGUSTIN MARCARIAN
Hernán Lacunza
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A seis meses de haber cumplido 50 años, Lacunza llegó a ser el encargado de la política económica de Argentina luego de ejercer, desde diciembre de 2015, como ministro de Economía del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, encabezado por María Eugenia Vidal, una de las máximas figuras del macrismo.

Se había acercado al macrismo dos años antes, cuando asumió como gerente del Banco Ciudad, institución financiera pública de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, circunscripción electoral en la que el actual presidente se hace fuerte y de la que Macri llegó a ser jefe de Gobierno.

Lacunza supo también ejercer cargos públicos durante las gestiones de Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández de Kirchner (2007-2011 y 2011-1015). Hasta 2005 fue director del Centro de Economía Internacional en el Ministerio de Relaciones Exteriores. De allí pasó al Banco Central de la República Argentina (BCRA), donde ejerció como economista jefe hasta 2008, cuando asumió la gerencia general de la institución.

Mientras ejercía ese cargo, Lacunza fue uno de los jerarcas que quedó en el medio del enfrentamiento entre el presidente del BCRA, Martín Redrado, y el Gobierno de Fernández de Kirchner, al negarse a habilitar la transferencia de reservas del Banco Central hacia el ‘Fondo del Bicentenario’, un instrumento financiero con el que aquel Gobierno pretendía saldar la deuda externa.

El diferendo, que incluyó denuncias judiciales contra Redrado, culminó con la remoción de Lacunza el 7 de enero de 2010.

¿Qué le espera a Hernán Lacunza?

A pesar de la conferencia brindada el mismo día de su asunción, el futuro y las posibilidades de acción de Lacunza al frente del Ministerio de Hacienda aún es una interrogante para el sistema político y los analistas económicos argentinos.

En diálogo con Sputnik, el economista e integrante del Frente Popular Claudio Lozano consideró que no habrá un cambio de rumbo significativo con la llegada de Lacunza y calificó sus primeros anuncios como «una ratificación del intento de mantener el acuerdo con el FMI y la política del Banco Central».

Para el economista, la postura manifestada por el Gobierno de Macri implica «la profundización del cuadro recesivo, en un contexto de mayor inflación en los próximos meses y agravamiento de las condiciones de vida de la población, que en un 58% presenta vulnerabilidades económicas».

Por su parte, la economista Marina Dal Poggetto, también consultada por Sputnik, valoró que haya cierta continuidad en la gestión iniciada por Nicolás Dujovne: «Mantiene en funciones a tres personas que son las que manejaban el Ministerio, el secretario de Hacienda, Rodrigo Pena; el secretario de Finanzas, Santiago Bausili; y al secretario de Legal y Administrativo, Hugo Medina».

«De alguna forma (Lacunza) llega con gente nueva pero el corazón del equipo económico sigue estando en funciones, lo cual es correcto dada la fragilidad del momento en que está asumiendo», añadió.

De todos modos, la economista advirtió que el nuevo ministro «no es mago», por lo que resolver los problemas que la economía argentina tiene planteados no será tarea fácil. «Argentina está enfrentando una crisis financiera pero al mismo tiempo una dinámica política muy complicada», apuntó.

En efecto, Dal Poggetto señaló la particularidad de que el revés electoral sufrido por el oficialismo en las primarias dejó «a un presidente en funciones muy debilitado y un candidato (Alberto Fernández) con los votos suficientes para ser presidente pero recién en octubre».

El Fondo Monetario Internacional, el otro responsable

Ambos economistas coincidieron en la importancia que el Fondo Monetario Internacional (FMI) tendrá en los meses que quedan del mandato de Macri.

Dal Poggetto afirmó que el Gobierno argentino «requiere» los desembolsos del organismo internacional para hacer frente a su programa fiscal y monetario, aunque las metas comprometidas ahora «entran en colisión» con la inflación y la caída del nivel de actividad de los últimos meses. Además, el organismo internacional es el único que aún presta dinero a la gestión macrista.

«Argentina tiene cortado el crédito y hoy está pagando gracias a los desembolsos del FMI, contrayendo deuda y cancelando otras deudas del mercado. Esa es la dinámica desde que se cortó el crédito a Argentina en abril de 2018», señaló Dal Poggetto.

Lozano, por su parte, fue más allá y apuntó que el país suramericano «está en una situación de cesación de pagos encubierta por el acuerdo con el FMI».

Para Dal Poggetto, una de las claves del programa del FMI para Argentina es que tiene «un condicionamiento político enorme», ya que «estaba apoyando directamente al Gobierno de Macri».

En efecto, Dal Poggetto señaló la particularidad de que el revés electoral sufrido por el oficialismo en las primarias dejó «a un presidente en funciones muy debilitado y un candidato (Alberto Fernández) con los votos suficientes para ser presidente pero recién en octubre».

El Fondo Monetario Internacional, el otro responsable

Ambos economistas coincidieron en la importancia que el Fondo Monetario Internacional (FMI) tendrá en los meses que quedan del mandato de Macri.

Dal Poggetto afirmó que el Gobierno argentino «requiere» los desembolsos del organismo internacional para hacer frente a su programa fiscal y monetario, aunque las metas comprometidas ahora «entran en colisión» con la inflación y la caída del nivel de actividad de los últimos meses. Además, el organismo internacional es el único que aún presta dinero a la gestión macrista.

«Argentina tiene cortado el crédito y hoy está pagando gracias a los desembolsos del FMI, contrayendo deuda y cancelando otras deudas del mercado. Esa es la dinámica desde que se cortó el crédito a Argentina en abril de 2018», señaló Dal Poggetto.

Lozano, por su parte, fue más allá y apuntó que el país suramericano «está en una situación de cesación de pagos encubierta por el acuerdo con el FMI».

Para Dal Poggetto, una de las claves del programa del FMI para Argentina es que tiene «un condicionamiento político enorme», ya que «estaba apoyando directamente al Gobierno de Macri».