Fallece el expresidente peruano Alan García tras pegarse un tiro en la cabeza

El expresidente peruano Alan García (1985-1990, 2006-2011) falleció en un hospital luego de una larga operación en la que médicos intentaron salvarlo de un intento de suicidio, cometido cuando la policía ingresó a su casa para detenerlo por orden judicial.

La información sobre la muerte del exmandatario fue confirmada oficialmente por el presidente de Perú, Martín Vizcarra, mediante una publicación en su red social de Twitter.

por Socio informativo
Agencia de Noticias Sputnik

A su vez, el abogado de Alan García, Erasmo Reyna, lamentó la pérdida y aseveró en Twitter que el exmandatario «no está muerto, está junto a Haya», refiriéndose a que García se encuentra ya junto a Víctor Raúl Haya de la Torre, el fallecido expresidente y fundador del Partido Aprista peruano.

​El abogado también confirmó en declaraciones a la prensa local que el expresidente «tomó la decisión de dispararse».

Por su parte, el ministro del Interior, Carlos Morán, detalló que la Policía, al ingresar a la casa de García, encontró al exjefe de Estado quien les comunicó que antes de entregarse iba a hacer una llamada a su abogado, para lo cual se encerró en su habitación.

«A los pocos minutos se escuchó el disparo de arma de fuego y la Policía forzó el ingreso a la habitación y encontró al señor García en posición de sentado con una herida en la cabeza», dijo el ministro.

En una diligencia judicial realizada bajo el pedido del equipo fiscal Lava Jato, la Policía ingresó al domicilio del expresidente para proceder a detenerlo preliminarmente por presuntos delitos de corrupción.​

Al ingresar a la casa de García, la policía lo encontró herido y procedieron a su internamiento.

Sin poder salvarle la vida, Alan García falleció a aproximadamente las 10.30 hora local (15.30 GMT).

El Poder Judicial de Perú ordenó este 17 de abril prisión preliminar contra el exmandatario por presuntos delitos de corrupción en relación con el caso de la constructora brasileña Odebrecht.

La decisión de la justicia respondió al pedido del equipo fiscal Lava Jato que lo investigaba por presuntos aportes de la constructora a su campaña a la presidencia en 2006, así como por la concesión de la obra del Metro de Lima.