DIPUTADO ESPINOZA Y FALLO POR CRIMEN DE SU PADRE EN DICTADURA: «PUEDE SER UNO DE LOS DÍAS MÁS IMPORTANTES DE NUESTRAS VIDAS»

Cuarenta y cinco años han transcurrido desde aquel fatídico 2 de diciembre de 1973. En la madrugada de aquel día fueron ejecutados en la Provincia de Llanquihue, por agentes del Estado, el ex diputado socialista Luis Espinoza Villalobos y el dirigente campesino fresiano Abraham Oliva. Ellos, según consigna el Informe Rettig, fueron víctimas de un macabro plan para asesinarlos.

Su esposa María Marta Sandoval, aún viva con actuales 80 años, y sus hijos Luis, Ramón, Patricia y Fidel, han luchado por años para alcanzar la justicia.

Esta semana, el ministro Álvaro Mesa, quien investiga las causas de violaciones a los derechos humanos ocurridas en la zona sur del país, señaló que estaba afinando los últimos detalles para dictar sentencia, hecho que ocurriría impostergablemente este viernes 25. El magistrado, quien dirige su trabajo desde Temuco, estamparía su firma en el fallo desde la Región de la Araucanía, estimándose que en horas de la tarde la abogada de las familias Espinoza y Oliva, Pamela Sánchez, tendría en su poder dicho dictamen.

El diputado socialista Fidel Espinoza, quien junto a Javier Oliva (hijo de Abraham) encabezó por años la búsqueda de justicia en este caso, señaló estar «tranquilo, pero claramente expectante, porque esto ha sido una lucha de toda una vida. Nuestra madre siempre nos inculcó la búsqueda de justicia por la muerte de nuestro padre, pero nunca nos incitó al odio ni al revanchismo y eso, como hermanos, lo valoramos enormemente».

El parlamentario agregó que «tengo plena confianza en que la justicia actuará y que el principal violador de derechos humanos en la Provincia de Llanquihue, René Villarroel, alias «Juan Metralla», pasará los próximos años en la cárcel. Estando a cargo de la Tenencia de Fresia, no sólo participó en crímenes, también torturó, quemó los cuerpos de los detenidos con cigarrillos y violentó sexualmente a dos mujeres privadas de libertad. En aquellos tiempos, este personaje actuó como un verdadero criminal».

Consultado sobre si se encuentra contento ante la eventualidad de un fallo condenatorio, Espinoza fue claro. «Confío en la justicia, pero no podría sentir alegría, porque hay hijos y nietos de este criminal que no tienen culpa de las atrocidades que cometió. Si ello ocurre mañana, que es lo que esperamos, estaremos cerrando un ciclo como familia. Sin embargo, iniciaremos otro, porque seguiremos luchando por más justicia en otros casos, como el Fundo El Toro, donde ocho campesinos fueron ejecutados a mansalva. Para varios, acá aparece también el nombre de René Villarroel”.