Ante la creciente demanda de usuarios por concurrir a recintos de esparcimiento en temporada de verano y vacaciones escolares, la Seremi de Salud, Claudia Torrealba, junto a fiscalizadores de la unidad de Salud Ambiental, comenzaron a reforzar las labores inspectivas en campings y piscinas de Arica.
En terreno se encuentran constatando que los establecimientos cuenten con autorización sanitaria vigente y cumplan las condiciones básicas de funcionamiento, respecto a sus instalaciones y seguridad de las personas.
«En la comuna tenemos alrededor de 90 piscinas de uso público y restringido, y a la fecha ya llevamos el 30% de las inspecciones realizadas con el fin de garantizar la seguridad de nuestra población en el ámbito sanitario», señaló la autoridad.
Asimismo, agregó que “a la fecha ya hemos cursado siete sumarios por incumplimiento de condiciones básicas, niveles de cloro, elementos de salvataje y primeros auxilios, entre otros que deben ser regularizados a la brevedad para evitar el cierre de estos recintos. Por lo que el llamado a los centros de padres y apoderados, empresas e instituciones, es que al momento de contratar los servicios de un camping revisen siempre si el establecimiento y su piscina cuentan con la correspondiente autorización sanitaria”.
INSPECCIÓN
Según explicó la Seremi Torrealba, se fiscalizan las condiciones sanitarias generales (agua potable y alcantarillado, agua de la piscina), servicios higiénicos, vestidores, duchas, concentración de cloro libre residual entre 0,5 ppm y 1,5 ppm (partes por millón); así como el ph neutro permitido por el reglamento (entre 7,2 y 8,2).
La autoridad también llamó a la comunidad a evitar conductas de riesgo durante el baño, que puedan colocar en peligro tanto la vida e integridad física propia como la de otros bañistas. Si hay niños en la piscina o en áreas cercanas, la principal responsabilidad es de los padres o de los adultos a cargo de los menores, y así evitar accidentes.
De acuerdo al reglamento, las piscinas de uso público (municipales y campings) además deben contar con un salvavidas permanente y encargado de primeros auxilios. Mientras que las de uso restringido (restaurants, hoteles, condominios y otras de uso exclusivo de un grupo reducido de personas), deben contar con letreros que exija la supervisión de adultos para el baño de los niños.
Ambos tipos de piscinas deben tener protección, la que por lo general son rejas y salidas porosas o antideslizantes.