Indígenas peruanos protestan por los resultados electorales locales y dañan un oleoducto, el 30 de noviembre de 2018 cerca de Andoas, en la Amazonía
Petroperu/AFP
Indígenas que buscan anular los resultados de unos comicios locales impiden desde hace tres días la reparación de un oleoducto que ellos dañaron en la Amazonía peruana causando el derrame de 8.000 barriles de crudo, dijo este viernes la empresa estatal Petroperú.
«El crudo sigue saliendo y sigue impactando el ambiente. Esto es algo gravísimo», declaró la gerente de gestión social de la empresa, Beatriz Alva, en una reunión con la prensa extranjera.
Petroperú informó el miércoles que indígenas de Mayuriaga, unos 1.000 kilómetros al noreste de Lima, rompieron el oleoducto Norperuano que transporta crudo desde la Amazonía al Pacífico.
Desde entonces, los mismos indígenas han impedido que se aproximen las brigadas que deben reparar los daños en el kilómetro 183 del oleoducto, en la región amazónica de Loreto.
«No nos dejan poner la grapa (para sellar el ducto) hasta hoy (viernes). El tema de urgencia es detener la salida del crudo», expresó Alva.
La gerente explicó que esto perjudicará a la empresa canadiense Frontera Energy, concesionaria del ducto, que tendrá que detener el sábado el transporte de crudo.
«Si este problema no se soluciona de inmediato, Frontera tendrá que parar los pozos de producción y perderá unos 200.000 dólares diarios», dijo por su parte Manuel Ugaz, gerente del oleoducto, que recorre 1.106 kilómetros.
Petroperú estima que la reparación del ducto, que transporta 12.000 barriles por día, y la limpieza de la zona costará unos seis millones de dólares.
«El procedimiento técnico está listo, solo se espera la orden de la policía que nos pueda dar las garantías», sostuvo Ugaz.
Se estima que se han derramado más de 8.000 barriles, pero el crudo no ha alcanzado los ríos, dijo el gerente de Ambiente de la empresa, Víctor Huarcaya
Los indígenas amenazaron el 20 de noviembre con romper el oleoducto. Su reclamo no tiene nada que ver con Petroperú, sino que buscan que sean anulados los resultados de las elecciones locales celebradas en octubre, alegando irregularidades.
El oleoducto Norperuano, una de las obras de mayor envergadura del país, fue construido hace cuatro décadas.
En algunas ocasiones los derrames se debieron a fallas por falta de mantenimiento, pero otros por ataques de comunidades como forma de protesta. El anterior ocurrió en febrero.
«En total hemos tenido 23 cortes, siendo el primero en el ramal norte» del oleoducto, que tiene forma de «Y», dijo Ugaz.
En 2016 hubo 13 derrames. Según Petroperú, 10 de ellos fueron intencionales.
Desde inicios de 2017, más de 120 comunidades indígenas piden al gobierno peruano que se les consulte antes de firmar contratos de explotación de hidrocarburos en la Amazonía para evitar más derrames.
Fuente: rfi