NEGOCIOS / EL FONDO MONETARIO INTERNACIONAL (FMI) OFRECE SALVAVIDAS A ARGENTINA A CAMBIO DE “AUSTERIDAD”

El ministro de Hacienda Nicolás Dujovne y el presidente del Banco Central argentino Federico Sturzenegger, el jueves 7 de junio de 2018. REUTERS/Marcos Brindicci

por RFI

Un salvavidas crediticio por 50.000 millones de dólares acordó con el Fondo Monetario Internacional (FMI) el gobierno de Mauricio Macri en Argentina, para atenuar la escasez de divisas y fortalecer la economía.

Argentina asume su compromiso de ajuste escalonado en las cuentas del Estado. «Acudimos al FMI para evitar una crisis», admitió el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, al anunciar este jueves en Buenos Aires el acuerdo ‘Stand-By’ de 36 meses, que aún debe recibir la luz verde del directorio del Fondo.

El objetivo es reducir el déficit fiscal del país de 3.2% a 2,7% del PIB desde 2018, para alcanzar en 2021 un superávit fiscal de 0.5% del PIB.

Para ello, se Argentina pretende fortalecer la autonomía del Banco Central y reducir la inflación, de un 27% anual actualmente a un 17% en 2019 y luego a un 9% en 2021. Según el mismo ministro de Hacienda, el acuerdo prevé en casos necesarios «clausulas de salvaguarda social inéditas»: permitirían más flexibilidad con las metas del déficit para seguir financiando programas sociales.

Mauricio Macri anunció el 8 de mayo que había solicitado un préstamo del FMI, en medio de una corrida cambiaria que depreció en más de 20% el peso y llevó elevar a 40% la tasa de interés y a inyectar al mercado unos 11.000 millones de dólares de las reservas del Banco Central.

Para algunos expertos, la apuesta del presidente Macri es arriesgada en la medida que el FMI goza de muy mala imagen ante la opinión pública. La simple mención de sus siglas despierta temores de cataclismo financiero y recortes sociales drásticos.

Los sindicatos ya están en pie de guerra. La central mayoritaria, la CGT amenaza con imponer una huelga general si el gobierno no frena la subida de tarifas de gas, electricidad y agua.

Hasta ahora Macri ha logrado evitar recortes abruptos, pero deberá encarar resistencias internas.