CON ESTRICTAS MEDIDAS DE SEGURIDAD SE INICIA JUICIO ORAL CONTRA CARABINERO QUE DISPARÓ POR LA ESPALDA A ADOLESCENTE MAPUCHE EN EL 2016

El Tribunal Oral de Collipulli inició el juicio oral en contra de un funcionario de Carabineros de Chile, acusado de disparar a quemarropa y por la espalda -en 2016- al joven de origen mapuche Brandon Hernández Huentecol, de 17 años en ese momento, produciéndole graves secuelas que se arrastran hasta la actualidad.

El Instituto Nacional de Derechos Humanos a través de su Sede regional de La Araucanía es parte querellante, presentando acciones legales por los delitos de lesiones graves y apremios ilegítimos, inhumanos y/o degradantes.

A través de ellas el INDH busca determinar la responsabilidad penal del funcionario policial, en la perspectiva de garantizar el acceso a la justicia al adolescente, todo en el  contexto del conflicto intercultural entre el Estado y el pueblo mapuche. En este sentido, el INDH espera que se impongan sanciones proporcionales a la gravedad del daño ocasionado, que contribuyan igualmente a garantizar la no repetición de hechos constitutivos de violaciones graves a los derechos humanos.

En la audiencia se efectuaron los alegatos de apertura de cada uno de los intervinientes, entre ellos el Ministerio Público, las partes querellantes y la defensa, finalizando con la declaración judicial del acusado que luego de exponer su versión de los hechos fue sometido al examen de los intervinientes y del Tribunal. Los alegatos de clausura quedaron agendados para el miércoles 9 de enero próximo.

Según el relato de los hechos, el 18 de diciembre de 2016 los carabineros se encontraban realizando un procedimiento en el sector Curaco (Collipulli), bajo el cual se detuvo a un vehículo y a las personas que transitaban en él. Justo en ese instante iba pasando en bicicleta el niño I.G. H. H. de 13 años en ese entonces, hermano menor de Brandon, quien transitaba por la vereda de enfrente del control cuando fue interceptado por el carabinero.

Asustado I.G. H. H. gritó por la ayuda de su hermano Brandon quien acudió rápidamente al lugar siendo reducido por el policía, quien para sujetarlo posó su pie sobre la espalda del adolescente, para luego dispararle, dejándolo herido con riesgo vital.

Brandon Hernández Huentecol fue intervenido quirúrgicamente primero en el Hospital de Angol para luego ser trasladado hasta las dependencias de la Clínica Alemana de Temuco, donde permaneció hospitalizado por un largo periodo, siendo sometido a numerosas operaciones quirúrgicas.

Al momento de los hechos cerca de cien perdigones habrían quedado incrustados en el cuerpo de Brandon, principalmente en la zona de su espalda y cadera. Hasta la fecha se contabilizan 17 operaciones, manteniéndose aún alojados en su cuerpo aproximadamente 80 proyectiles.