Según Eduardo Salas, líder de la colectividad, los sectores del PC y del Frente Amplio tienen «dos verdades» en torno a los DD.HH., cuando este tema «es universal y no pertenece a nadie en particular». Además, el dirigente pidió «prudencia» en las acusaciones que pesan en contra de Luis Castillo, subsecretario al que acusan de encubrimiento en torno al caso Frei Montalva.
La salida de Mauricio Rojas del Ministerio de las Culturas, por sus críticas al Museo de la Memoria, sigue siendo motivo de debate en el mundo político. Por lo mismo, el presidente del PRI Demócrata, Eduardo Salas, se refirió a la discusión sobre derechos humanos que se está dando al interior de Chile Vamos, como también a la situación del nuevo subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo, quien es acusado por la Democracia Cristiana de encubrir y ocultar información sobre la muerte del expresidente Eduardo Frei Montalva.
Respecto a lo primero, Salas, quien fue abogado de la Vicaría de la Solidaridad entre 1986 y 1990, expresó que «el tema de los DD.HH. es tan delicado y de una fragilidad tan grande que pretender usarlo o sobreutilizarlo políticamente le va a traer costos siempre a cualquier sector político, por eso que hay que tener mucha prudencia y cuidado».
«Lo que pasó en Chile con la dictadura militar requiere la demanda de todos los actores políticos y de las nuevas generaciones. Este tipo de cosas no pueden volver a ocurrir porque fueron atroces. Por esa razón, desde el PRI Demócrata la posición tras los dichos de Mauricio Rojas fue natural, inmediata y auténtica, porque claramente ameritaba su renuncia», declaró en el programa «Sin Pretexto» de Radio Universidad de Santiago.
«Hay tener en cuenta -agregó- que el Presidente Piñera tiene una hoja de vida impecable en materia de derechos humanos: cerró el Penal Cordillera, creó el Instituto de DD.HH. y en la conmemoración de los 40 años del Golpe de Estado nos habló de los ‘cómplices pasivos’. O sea, era un tema que no merecía cálculo político».
En este punto, el dirigente habló del «doble estándar» que existe en sectores de la izquierda. A su juicio, «si la gente del Partido Comunista y del Frente Amplio no son capaces de reconocer que en Nicaragua hay un gobierno con un aparato del Estado que está provocando muertes y violaciones a los DD.HH., que es lo mismo que pasa en Venezuela con Nicolás Maduro y Kim Jong-un en Norcorea y que ocurrió en la URSS con Stalin, eso es caer en dos verdades».
«Hay una sola verdad en torno a los DD.HH. Si esto es así, ¿por qué razón la dividen? Por conveniencia. Entonces, uno deja de creer. Yo no creo que de verdad el PC crea en los derechos humanos por más duro que haya que muchos compañeros que fueron exterminados por la dictadura. Ellos no comprenden y no evolucionan de que los DD.HH. son universales y no pertenecen a nadie en particular», insistió.
Evópoli
Consultado por los efectos de este debate en el oficialismo, Salas expresó que «nosotros como PRI Demócrata no estaríamos en Chile Vamos si en el caso de RN y la UDI, que son partidos tradicionales, no hubieran evolucionado y entendido que los derechos humanos y la democracia eran irrenunciables siempre y que ese era el punto de partida de cualquier conglomerado».
«Además que ellos (RN y UDI) no han negado nada. Sus líderes nacionales Mario Desbordes y Jacqueline van Rysselberghe fueron críticos de los dichos del exministro Rojas respecto al ‘montaje’, más allá de la explicación histórica que tengan del golpe o del gobierno de la Unidad Popular. La historia de Chile se escribirá cuando tenga que escribirse de manera más coherente. Lo que sí es que las violaciones a los DD.HH. no requieren contexto», aseguró.
Sobre Evópoli, Salas advirtió que «es un partido nuevo y con una nueva generación que no arrastra lo del pasado, pero que debe tener cuidado de no caer en la tentación de la sobreutilización de un tema tan delicado como son los DD.HH., dado que finalmente el daño lo reciben todos los chilenos».
Para terminar, el dirigente llamó a ser «extremadamente prudente» con la situación de Luis Castillo, porque «hay un juicio que lleva 20 años de investigaciones y con un juez que ha sido acucioso y que ha establecido el asesinato y el magnicidio de Eduardo Frei Montalva por agentes de la dictadura».
«Eso sí, hay algo que no se ha podido establecer, lo que al menos deja el beneficio de la duda, pero no esto de decir que él fue encubridor y que ocultó la autopsia. Nada de eso está establecido en la causa. Él fue citado a declarar como testigo y ni siquiera tiene la calidad de imputado. El encubrimiento es una forma de participación de un delito. Así que cuidado», enfatizó.
Salas concluyó diciendo que si Castillo «hubiera participado de alguna manera como encubridor, cómplice o autor, eso sería gravísimo y habría que tomar medidas. Pero hasta ahora no se ha establecido tal participación. ¿Por qué se insiste en aquello? Por una pequeña ganancia política. Como el tema está de moda todos lo utilizan».